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NeoFronteras

Biocarburantes, ¿solución o problema?

lunes 26 mayo 2008 - Tipo: Colaboración

Por José Olivares Pascual

La producción de biocarburantes y la esperanza en su potencial para contribuir al desarrollo sostenible y a la reducción del uso energético de los recursos no renovables crece casi exponencialmente. Sin embargo, no todo es color de rosa. Por ahora se utilizan, en su mayor parte, materias primas que están siendo derivadas a este fin compitiendo con la alimentación como objetivo primario. El descuento impositivo que en países, como Estados Unidos, se aplica al bioetanol está llevando al cultivo del maíz a ocupar el suelo tradicionalmente utilizado por el trigo y la soja con la consecuente disminución de la cosecha de este cereal y de la leguminosa y su correspondiente aumento de precio. Los altos precios pueden ser buenos para los agricultores pero no para los consumidores, y especialmente para los más pobres. Según el Banco Mundial, un 1% de incremento en el precio en los alimentos de subsistencia supone una bajada del 0,5% en las calorías consumidas.

Por otra parte, no se puede olvidar la acción negativa de este cambio de cultivos sobre el efecto invernadero, dada la considerable cantidad de fertilizante nitrogenado que se aplica al maíz que conduce a una emisión importante a la atmósfera de óxido nitroso con un potencial global de calentamiento más de 300 veces superior al temido CO2. Esta incidencia de la fertilización nitrogenada es más evidente en la sustitución de la soja que es un cultivo limpio al utilizar directamente el nitrógeno de la atmósfera.
La derivación de los cultivos tradicionalmente alimenticios a la producción de biocarburantes, ya sea bioetanol o biodiésel, va a llevar siempre aparejada estos efectos colaterales indeseables sin resolver el problema energético, ya que de una hectárea de colza sólo se obtienen unos 600 kilos de biodiésel y de una de maíz 4.000 litros de etanol, lo que supone el consumo de unos cuantos automóviles por corto tiempo. Además, la obtención de bioetanol es en muchos casos poco eficiente, pues se produce algo más de una unidad de energía a partir del maíz por unidad consumida en el cultivo, transporte y fermentación. Esta eficiencia se incrementa al doble en el caso de la remolacha y ocho veces en la caña de azúcar, el cultivo más eficiente.

Se puede decir que algo es mejor que nada por lo que la búsqueda de especies vegetales que no compitan ni por suelo ni por clima podría tener un futuro prometedor. Plantas que crecen en suelos marginales o en condiciones climáticas inadecuadas para los cultivos de subsistencia puede ser materia prima importante para la obtención de biocarburantes. Como tal está creciendo en interés la Jatropha curcas con semillas que contienen un aceite convertible fácilmente en biodiésel. Esta planta tóxica que no requiere tratamiento con agroquímicos, originaria de América Central y extendida por África y Asia, crece en climas secos sobre suelos de baja fertilidad donde otros cultivos no son posibles. Es un arbusto que puede producir durante 50 años a razón de 4.000 kilos de aceite por hectárea sin apenas gasto de mantenimiento. Esta rentabilidad supera la de muchas cosechas alimentarias por lo que si no se ponen trabas puede acabar invadiendo suelo tradicionalmente dedicado a soportar la alimentación humana y animal. Estudios económicos realizados en Argentina presentan este cultivo con unos rendimientos muy tentadores para competir con la soja con el consiguiente incremento de precio de esta leguminosa.

Existe el peligro de que este ejemplo de la jatrofa sea un modelo de lo que podría ocurrir con especies vegetales hoy marginales, que pueden verse traídas a un primer plano al socaire de la demanda de biocarburantes y empezar a competir por suelo cultivable. Es necesario establecer a nivel global una política ad hoc para evitar que se incremente el cultivo de estas plantas a costa de la producción de alimentos, teniendo en cuenta, además, que, sin ánimos de exagerar, se necesitaría dedicar a las plantas para biocarburantes cuatro veces la superficie cultivable del planeta para poder sustituir solamente el petróleo y el gas consumido por el transporte.

En este sentido, el aprovechamiento al máximo de los residuos es fundamental, al mismo tiempo que es ineludible potenciar la investigación en la dirección de buscar o mejorar otras alternativas no contaminantes y no competitivas

José Olivares Pascual es profesor de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Este artículo se publicó el 21 de mayo en el diario El País y se reproduce aquí con permiso expreso de su autor.

26-05-2008  »  NeoFronteras

Comentarios: 2

  1. acuariogratis@hotmail.com
    3 julio 2008 @ 10:04 pm

    Creo que el problema de los biocombustibles consiste en que se han englobado muchas cosas dentro del mismo termino. Ademas se han creado falacias achacandoles problemas que no tienen. Tambien se han valorado como soluciones, en algunos casos haciendo uso de un exagerado optimismo.

    Vayamos por partes:

    ¿Es sostenible plantar parta tener biocombustibles?
    Mi opinión es que NO. Motivos:
    – Ninguna especie de oleagelatinosas o cereales podria proporcionarnos todo el combustible que necesitamos tan solo para mover nuestros coches.
    – Ninguno de estos cultivos parece tener un balance neto positivo de energia.
    – Ninguno de estos combustibles es neutro desde el punto de vista del CO2, si tenemos en cuenta todos los procesos (hay que incluir la fabricacion de fertilizantes).
    – Ninguno de estos combustibles es economicamente competitivo. Sale «a precio» porque estas fiscalmente subvencionados, mientra que los combustibles fósiles son uno de los bienes más gravados.

    Si los anterior es cierto, ¿Por que se subvencionan?
    USA y la UE tienen amplios excedentes agricolas, el primero de cereales, el segundo de azucar, grasas animales y vegetales. Historicamente los excendentes (producidos con subvenciones agricolas) son comprados por el gobierno y vendidos al tercer mundo con fuertes subvenciones a la exportacion. Los sobrantes se almacenan o destruyen. Por ejemplo, el maiz es mas económico en Africa que en USA, donde se planta. Lo mismo podemos decir del azucar o la margarina europea.
    De repente los gobiernos vieron que podian crear un nuevo mercado interno para los excedentes (menos subvenciones a la exportacion), aumentarian la demanda de productos agricolas (agricultores contentos), reducian la importacion de crudo (saneamiento de la balanza comercial) y ademas parecía ecologico (los «verdes» contentos). Parece lógico que apoyasen esta idea sin dudar.

    ¿Y la subida de alimentos?
    Realmente desconozco el motivo. El precio de compra al agricultor no ha subido y Europa sigue manteniendo un sistema de cuotas de producción. Por tanto el precio seguramente depende mas de la especulación que de la escasez.

    ¿Y los pobres de Africa?
    Los paises del tercer mundo llevan años quejandose de que USA y la UE exportan alimentos por debajo del precio de coste. Ello, decian, destruye sus economias locales al competir deslealmente con sus agricultores. Ahora parecen quejarse por que el precio de los alimentos se aproxima a su coste real.
    El problema del tercer mundo parece ser mas una cuestion politica que economica. Seguramente la autarquia de sus mercados, un sistema poco democratico y las guerras enquistadas sean los verdaderos motivos del hambre.

    Entonces ¿Son «malos» los biocombustibles?
    Normalmente si, pero el panorama cambia totalmente si se fabrican a partir de residuos. Europa esta haciendo un importante esfuerzo para fabricarlo a partir de aceites usados, grasas animales sobrantes y residuos de la oliva.
    Hay grandes esperanzas en poder convertir la celulosa en etanol. En este caso las herbaceas, el serrin, papel usado y otros residuos maderables podrian disminuir enormemente la dependencia del petroleo.
    Esto disminuiria la dependencia de petroleo, pero no podria sustituirlo totalmente.

    ¿No hay solucion?
    Si, claro que hay solucion. ¡¡El ahorro!!
    – Los medios de transporte colectivos facilmente pueden funcionar con otras fuentes de energía, como electricidad.
    – La calefaccion puede realizase con bombas de calor (electricidad) y el aislamiento termico puede ser incrementado economicamente.
    – La electricidad puede obtenerse de centrales nucleares.
    – El agua sanitaria (la ducha) puede ser calentada por el sol.
    Cualquier coche actual puede consumir la mitad con un adecuado mantenimiento y un cambio de costumbres del conductor. Podeis verlo en http://ahorrar-gasolina.blogspot.com/

    Conclusion
    Los biocombustibles, siempre que usemos desechos para obtenerlos, son una estupenda idea. Pero el ahorro es el secreto para poder salir de un situacion de petroleo caro y escaso.

    Nota importante:
    Este comentarios contiene OPINIONES que pueden considerarse politicas. Logicamente no tienen por que ser compartidas y distan de ser verdades contrastables o absolutas.

  2. gustavo
    8 enero 2009 @ 5:25 am

    ¿Por qué no investigan la nueva batería llamada «eestu» (fabricada por la compañía «eestor») la cual almacena gran cantidad de energía eléctrica y es muy liviana, apta para vehículos? De esa manera se utilizarían fuentes de energía como la solar, eólica y mareomotriz, para generar energía eléctrica barata.